Como cristianos sabemos que necesitamos tener una relación con Jesús, así como él mismo nos lo ha enseñado. Durante toda su vida tuvo una relación estrecha y profunda con su Padre – Dios. En todo momento, pero sobre todo durante las horas en que podía estar solamente con Dios, durante la noche él se iba al monte a orar. Incluso, la noche de su pasión va a orar al huerto.

a. Leer: Cuarta Parte del Catecismo de la Iglesia Católica, La oración cristiana, primera sección: La oración en la vida cristiana.

Capítulo Primero, La Revelación de la Oración, la llamada universal a la oración..

Capítulo Segundo, La tradición de la oración.

Capítulo Tercero, La vida de oración.


b. Responder estas preguntas: